Y es que no comprendes que el daño está hecho
Que la herida no terminaba de sanar cuando un puñal la volvió a atravesar
Vil traición de amargos besos que no ha querido reconocer
Cegarse puede ser un remedio para sobrevivir, pero el olvido no llega.
Me miras a los ojos hablándome de amor y mil promesas,
palabras que el viento se ha ido llevando porque como globos en el cielo las dejaste escapar
Las soltaste y tus manos no cumplieron aquello que tus dulces palabras me enseñaron a amar.
Te miro y te muestro aquella sonrisa que conoces,
Esa que guarda secretos y un dolor profundo
La ignoras y haces como si nada hubiese ocurrido
Cómo si en el océano de tu existencia mis lágrimas fuesen un problema.
Me miras , sonríes, prometes una vez más
Promesas que tus propias manos suelen deshacer
Y cansada de luchar veo mi fe escapar en cada suspiro que doy
Esa fe que solo por ti recobré en el amor
Recojo mis pedazos y herida busco la salida
Palabras, promesas y besos me detienen, pero los recuerdos duelen.
Dicen por ahí que sin dolor no hay amor.
Fue, tal ves,por ello que desterré de mi vida a los dos.
Por eso escribo; pues quizás alguna vez, después de mucho leerme, lo llegues a comprender.
domingo, 14 de enero de 2018
Promesas, heridas, miedo.
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